martes, 15 de marzo de 2016

Cómo elegir el vestido de mantilla para Semana Santa

Queridas amigas
comenzamos nuestra andadura en el mundo 'blogger' con la ilusión de convertirnos en un espacio al servicio del estilo, la moda y las tendencias. Pero sobre todo, con el ánimo de ayudaros y aconsejaros a la hora de interpretar estas tendencias y llevarlas a vuestro terreno, a vuestra fisonomía y personalidad. 

Desde Astrud entendemos la moda y la indumentaria como una cultura atemporal en la que no hay lugar para modas pasajeras, encasillamientos, límites ni fronteras. Todo debe estar al servicio de la elegancia, el estilo, la comodidad y el buen gusto. Pero ante todo, al servicio de tus necesidades, de tus mejores momentos, ¡en definitiva de tu vida!


En este primer post, teniendo en cuenta que nuestra tienda está en Sevilla y que quedan escasos días para el comienzo de su Semana Santa, no podemos más que dedicar unas líneas e imágenes a mostraros nuestros vestidos de mantilla. La mantilla negra es un atuendo tradicional que encierra un protocolo que se ha de respetar: si tienes menos de 18 años no debes lucirlo; solo es adecuado en Jueves y Viernes Santo. 


La mantilla, un protocolo
Debes guardar una compostura porque supuestamente vas a visitar y rezar en los templos, no de fiesta. Esto no significa que no puedas charlas con amigos o tomarte un café o cerveza, pero siempre con discreción. El maquillaje debe ser muy suave y el peinado, siempre en moño bajo. Prescinde de joyas, apenas unos pendientes a juego con el broche de la mantilla, y nada más. Nada de gafas de sol, pulseras ni collares. Las medias y zapatos, negros.

Los vestidos de mantilla están prácticamente al servicio de este elemento, la mantilla. Pero esto no significa que debas descuidarlos, ni mucho menos. Más bien tu misión, a la hora de elegir y comprar el vestido apropiado, es buscar un equilibrio en el conjunto. Ten en cuenta que la fuerza visual de tu atuendo estará en la parte superior, en la cabeza, con la peina y la mantilla de encaje. Estos elementos son los protagonistas de tu look, por eso, si quieres comprar un vestido de mantilla, su elección debe atender a la discreción. ¡Huye de cualquier exceso!


Un vestido para cada mujer
Ahora bien, para cada tipo de mujer hay un vestido. Siempre y cuando respetes el largo de la falda y evites escotes pronunciados, puedes jugar con muchos elementos. Desde el tipo de tejido a las mangas, pasando por la forma de la espalda, los adornos, etc. Hay muchas posibilidades para no aburrirte ni sentir que vas vestida igual que todas las demás. Vamos a repasar algunas y confiamos en que os sirva de inspiración:


Mantilla sobria: es la opción preferida si huyes de cualquier elemento ornamental y buscas pureza en las líneas. La manga al codo y el escote barco rompen la excesiva verticalidad y el tejido brocado compensa esta versión clásica del vestido de mantilla. El modelo que os presentamos a continuación es además un ejemplo de versatilidad, porque no deja de ser un vestido negro básico de fiesta, que podrás reutilizar en muchas ocasiones y darle otro aire con los complementos: una cena especial, un evento importante, una boda de noche, etc.

Vestido brocado manga larga, 49,95 euros.

Mantilla chic: este vestido ofrece unas características más desenfadadas, como la ausencia de mangas, la leve transparencia del escote y el lazo, que le da un aire muy chic. Es un vestido perfecto si buscas escapar un poco de la sobriedad, pero sin perder un ápice de elegancia ni de la esencia del vestido de mantilla. No obstante, si prefieres no ser demasiado atrevida ni enseñar los brazos, puedes hacer unas mangas con el mismo tejido. Así tendrás un vestido en dos versiones diferentes que podrás utilizar, tanto de mantilla, como en otras ocasiones y celebraciones.

Vestido sin mangas con lazo y rejilla en el bajo, 59,95 euros. 

Mantilla seductora: con esta opción damos un paso más hacia un resultado más sensual y atrevido. Ten en cuenta que en Semana Santa, la mantilla no deja de ser un vestido 'de luto' que las mujeres lucen en Jueves y Viernes Santo. Día en que se conmemora el fallecimiento en la cruz de Jesucristo. Cualquier vestido con generoso escote, o palabra de honor, o con un largo por encima de las rodillas, deja de ser un vestido de mantilla. Sin embargo, con esta opción de encaje y transparencias en la espalda hacemos un guiño 'seductor' con la apertura de la espalda. Todo un acierto si te apetece ser un poco atrevida, pero sin pasarte.

Vestido encaje manga larga, 49,95 euros.


Mantilla actual: la clave de este vestido, absolutamente sobrio y discreto, está en el volumen de las mangas. Los volúmenes en los tejidos, situados en zonas estratégicas del cuerpo, es una tendencia muy actual que podemos ver en las pasarelas internacionales. Concede a las prendas un aire futurista, pero al mismo tiempo nos recuerda a épocas pasadas, como el barroco. Aquí el resultado no puede ser más encantador, porque los brazos quedan cubiertos creando un efecto de pequeña capa, muy apropiada.

Vestido con mangas de capa y frunce, 119 euros. 

¡Y hasta aquí nuestro primer post! Esperamos que os haya sido de utilidad a las que queráis vestiros de mantilla esta semana Santa. Y a las que no, que os animéis a hacerlo y probar la experiencia. Ya sabéis que en Astrud estaremos encantados de asesoraros en todo lo que necesitéis. Podéis hacer vuestras consultas dejando un comentario en este post, llamándonos al 954 22 35 22 o escribiéndonos un mensaje privado en nuestra página de Facebook.

Fotos: Francisco Antúnez.
Zapatos: Nuria Cobo.