Cómo vestirte de calle para ir a la Feria

Llegan las ferias de los distintos puntos de Andalucía y la gran cita festiva de Sevilla: la Feria de Abril. Sabemos que muchas de vosotras os halláis sumergidas en un revuelo de volantes y lunares, de arreglos de última hora, renovación de complementos, zapatos, mantoncillos... Algunas estaréis deseando estrenar ese vestido nuevo que tan bien os sienta, o incluso ya habréis decidido cual de los varios que tenéis en el armario vais a lucir en cada día de visita al Real.

Pero, ¿qué pasa si por cualquier motivo decides que no te vas a vestir de flamenca? Porque no te apetece, porque apenas vas a ir a la Feria un día, porque no te da tiempo a prepararlo todo, o sencillamente porque no te gusta. El mundo de la moda 'feriante' no se acaba en el traje de faralaes, pero lo cierto es que para muchas de vosotras es un dilema decidir cómo os vais a vestir para ir a la Feria. Y son muchos los errores que se cometen, porque a la Feria, ante todo, hay que ir arreglada, elegante y con estilo. ¿Preparadas para leer unos consejos? Allá vamos:

1. Queda prohibido vestirte de calle con complementos de flamenca: en los últimos años hemos asistido con horror a cómo se ha ido implantando sin remedio la tendencia de lucir complementos de flamenca aunque no nos vistamos como tal. A saber: un vaquero y camisa sencilla con collar de cuentas, pendientes, pulseras y una flor en el pelo sacados de la caja donde guardas tus accesorios de flamenca de toda la vida. El resultado de esta especie de híbrido no puede ser menos elegante. Si decides no vestirte de flamenca, debe ser con todas las consecuencias. Así que olvídate de los complementos y apuesta por otros acorde con la ropa que lleves.

2. Sí a los prints de lunares y de flores: en contraposición a lo aconsejado anteriormente, la Feria sí es el escenario perfecto para lucir prendas con los estampados que suelen llevar los trajes de flamenca. Es el momento perfecto para que saques tus vestidos, blusas y tops de lunares y flores, las faldas tubo o de capa con colores intensos y cualquier motivo que tenga que ver con el folclore y la esencia andaluza.

3. Sí a la comodidad, no al sport: a la Feria hay que ir muy cómoda. Vas a pasar muchas horas de caseta en caseta, sentada o de pie, vas a bailar, vas a pasear por el Real, e incluso puede que disfrutes en alguna atracción. Pero ojo, comodidad no equivale a looks de sport ni un vaquero con camiseta, ni cualquier conjunto de los que te pondrías para salir una tarde a tomar café con tus amigas. Hay que ir más allá y apostar por prendas coquetas, con gracia y colores intensos. La Feria es luz, color, alegría... Y tú vas a formar parte de ella. Esto no significa que tengas que renunciar a tu personalidad a la hora de vestirte, ni que tengas que disfrazarte. Pero no te acomodes con la excusa de que quieres estar cómoda para ponerte el vaquero más trillado de tu armario.

Tampoco te agarres al pretexto del calor para prescindir de las medias. ¡Gran error! Las medias no solo unifican el color de la piel de tus piernas y las modela, sino que además evitan las posibles rozaduras de tus pies con el calzado.

4. Sí al brillo, pero de noche: si vas a ir a la Feria por la tarde-noche, es el momento perfecto para apostar por tejidos con brillo, lentejuelas, satinados, rasos, transparencias, looks lenceros y sexys, etcétera. La Feria es folclore, sí, pero también puede ser sofisticación y glamour y la noche es el escenario perfecto para ello. Recuerda siempre llevar una blazer o cazadora que le vaya bien a tu outfit para cuando refresque, porque lo vas a agradecer y vas a seguir igual de guapa.

5. Maquillaje intenso y cabello natural: ahora más que nunca es el momento de sacarle punta a tu lápiz negro de ojos y pintarte unos intensos labios rojos. La Feria es también una fiesta de seducción y no debes escatimar en todos los elementos que fomenten tu lado más sexy. Con el pelo, por contra, es aconsejable dejar las melenas sueltas o sujetarlo en una cola de caballo o un moño bajo. Olvídate de recogidos recargados o las típicas castañas de flamenca. Un buen tratamiento de nutrición y brillo y un peinado sencillo es mucho más favorecedor. Si tienes el cabello corto, igualmente apuesta por un peinado desenfadado y deja que la ropa y el maquillaje lo compensen.

6. Nunca olvides que menos es más, que la belleza no está en el exceso, sino en el equilibrio. Así que mucho ojo con recargarte de complementos: si por ejemplo apuestas por unos pendientes de aro grandes, prescinde de gargantilla o collar. Un brazalete o pulsera serán más que suficientes. 

Esperamos que estos consejos os hayan resultado útiles y no olvidéis que en Astrud estamos a vuestra disposición para asesoraros en todo lo que necesitéis. 

Fotos de Francisco Antúnez.